Estar sola y encontrar el cargador del celular en… la cocina!...donde lo habías dejado la última vez; andar con poca ropa por la casa después de un reconfortante baño; perderte la encomienda que te mandó una amiga con los cds que le pediste porque no había nadie para recibir al cartero; olvidarte de pagar la cuenta de la luz y saber que si no la pagás mañana te la cortan; escuchar que está pasando el basurero y darte cuenta de que olvidaste sacar la basura……. y a pesar de todo eso, no tener que darle explicaciones a nadieee!
Estar sola y convertirte en una contorsionista ucraniana para ponerte crema en la espalda; estar sola y a la noche, cuando vas a acostarte, darte cuenta que llegó el invierno y no tenés otros pies para entibiar los tuyos; estar sola y despertar el domingo, prepararte para desayunar como una reina, sin mirar el reloj, leer tu revista preferida, y no poder abrir el frasco de mermelada ni con un destornillador oxidado!!!
Estar sola, pensar que es para siempre y que no se desdibuje la sonrisa que ya es casi una mueca en tu cara. Que algún tiburón hambriento te pregunte con tono casi paterno: Por qué estás sola?, una mujer inteligente y linda como vos…
Estar sola porque elegiste cuidar y atender a tus propios hijos y no hacerte cargo de semejante grandulón inmaduro… (aunque todos lo vean como “el candidato”).
Estar sola y disfrutarlo. Que no te importe esta vez y las que vengan no poder pasarte crema por la espalda. Levantarte tranquilamente y cambiar el frasco de mermelada por el pote de queso untable, que además es importado y riquísimo! Que es viernes por la noche, tus hijos se fueron con el padre y el único programa en cable interesante ya lo viste… pero lo ves por vigésima vez mientras disfrutás de una copa de vino.
Estar sola y conocer a alguien a quien querés volver a ver. Dudar. Asustarte por llegar a perder todo lo que disfrutas al estar sola.
Desplomarte y perderte en el sillón, tomar un café sola, respirar profunda y tranquilamente, pensado la libertad que sentirías estando bien acompañada…
Estar sola y convertirte en una contorsionista ucraniana para ponerte crema en la espalda; estar sola y a la noche, cuando vas a acostarte, darte cuenta que llegó el invierno y no tenés otros pies para entibiar los tuyos; estar sola y despertar el domingo, prepararte para desayunar como una reina, sin mirar el reloj, leer tu revista preferida, y no poder abrir el frasco de mermelada ni con un destornillador oxidado!!!
Estar sola, pensar que es para siempre y que no se desdibuje la sonrisa que ya es casi una mueca en tu cara. Que algún tiburón hambriento te pregunte con tono casi paterno: Por qué estás sola?, una mujer inteligente y linda como vos…
Estar sola porque elegiste cuidar y atender a tus propios hijos y no hacerte cargo de semejante grandulón inmaduro… (aunque todos lo vean como “el candidato”).
Estar sola y disfrutarlo. Que no te importe esta vez y las que vengan no poder pasarte crema por la espalda. Levantarte tranquilamente y cambiar el frasco de mermelada por el pote de queso untable, que además es importado y riquísimo! Que es viernes por la noche, tus hijos se fueron con el padre y el único programa en cable interesante ya lo viste… pero lo ves por vigésima vez mientras disfrutás de una copa de vino.
Estar sola y conocer a alguien a quien querés volver a ver. Dudar. Asustarte por llegar a perder todo lo que disfrutas al estar sola.
Desplomarte y perderte en el sillón, tomar un café sola, respirar profunda y tranquilamente, pensado la libertad que sentirías estando bien acompañada…
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